The Grand Wizard

Ernie Roth tenía una habilidad con los juegos de la palabras como pocos, talento que lo llevó al éxito en todas las facetas de su vida profesional. Al principio de su carrera, fue un locutor de radio buscando destacarse en el centro del país. Pero para cuando su carrera terminó, se había ganado la reputación de uno de los managers más nefastos de la historia del entretenimiento deportivo.

En lo 60s, el entonces locutor Roth inició su travesía en el entretenimiento deportivo, trabajando en el área de Detroit. Con tan sólo 1.70m  y 68 kg., él no era una gran amenaza, físicamente hablando. Sin embargo, era su intelecto y su agudo sentido para las oportunidades lo que lo hicieron parte de la élite. Conocido en aquel entonces como Abdullah Farouk, él comenzó a manejar al Sheik, haciéndose notar como un astuto compinche solapado a lado del ring. Él fue uno de los primeros managers en intervenir a favor de sus clientes, casi iniciando revueltas en alguna ocasiones. Era tan bueno en lo que hacía que, en los 70s, se fue a la WWE y fue conocido como The Grand Wizard (El Gran Mago).

Vestido a propósito en ropa que no combinaba, turbante de lentejuelas y lentes de sol, el Wizard hizo un impacto inmediato. Él llevó a Stan Stasiak al Campeonato WWE en 1973, y luego a “Superestrella” Billy Graham a ganar el mismo título en 1977. También llevó a Pat Patterson, Ken Patera y Don Muraco al Campeonato Intercontinental en los 70s y 80s. Miembros del Salón de la Fama WWE como Killer Kowalski, Bob Orton, Greg Valentine, Mr. Fuji y Sgt. Slaughter fueron algunas de las Superestrellas que pasaron un tiempo siendo sus clientes. Fuji fue también un mánager exitoso por si mismo, sin duda aprendiendo algunos trucos del Mago.

Siendo conocido por ser entrometido, el Grand Wizard también era conocido como uno de los conversdores más astutos del entretenimiento deportivo. Él trajo su talento radiofónico, incitando a fans y réferis, recordándoles que “¡es difícil ser humilde cuando eres grandioso!”

Desafortunadamente, nadie conoció los límites de esa grandeza. En octubre de 1983, falleció a consecuencia de un ataque cardíaco. El Universo WWE fue aturdido por la pérdida repentina, haciéndole un tributo en televisión; su ex protegido, Sgt. Slaughter, incluso saludó una esquina vacía durante un encuentro en memoria de su mentor.

En 1995, The Great Wizard fue inducido póstumamente al Salón de la Fama WWE, con Slaughter como discursante durante la ceremonia. Su influencia ha inspirado a muchos managers a lo largo de los años. Aunque  su legado es vivido por los que comparten su profesión, su lugar en el Salón de la Fama lo solidifica como uno de los mejores managers de la historia.