El Campeón NXT Shinsuke Nakamura deja todo en el ring en su pelea con Bobby Roode en NXT TakeOver: San Antonio. 

Tanto el Campeón NXT Shinsuke Nakamura como Bobby Roode vinieron para amostrarle al mundo de que son capaces de dar la mayor lucha en la historia de NXT. Las dos Superestrellas llegaron al ring de manera grandilocuente: Roode acompañado por un pelotón de bellas damas y Nakamura montado en una plataforma móvil con luces estroboscópicas.

El Rey del Estilo Fuerte y El Glorioso intercambiaron golpes y el control. El momento clave del encuentro llegó cuando Nakamura le hizo a Roode una patada voladora en la orilla del ring. El Rey del Estilo Fuerte conectó, pero se dañó gravemente la rodilla cuando cayó fuera del cuadrilátero. Luego, Nakamura aplicó el Kinshasa, pero el dolor lo dejó tendido en la lona, junto al noqueado Roode. Eso hizo que el personal médico de NXT llegara a atenderlo, lo que le dio tiempo a su oponente de recuperarse. El japonés insistió en terminar el encuentro, aunque estaba claramente lidiando con un extenuante dolor.

Roode inmediatamente aprovechó la situación y conectó el Glorioso DDT, pero Nakamura valientemente (y sorprendentemente) despegó las hombros. Entonces, el retador le aplicó una palanca a la debilitada rodilla a su rival. El campeón se negó a rendirse y escapó, casi aplicándole un triángulo a la Gloriosa Superestrella.

No obstante, la rodilla de Nakamura no aguantó mantener la llave, permitiendo que Roode conectara un segundo Glorioso DDT por el 1-2-3 y se llevara el Campeonato NXT en este glorioso encuentro.